4:20 de la noche, no
hago nada más que ver videos frente al compu, pero estoy aburrido y agotado de
las pornos, entonces navego por youtube como quien cambia frenéticamente el
canal de su televisor, aleatoriamente salto por entrevistas a artistas del año
de la pera, escenas de teleseries y programas de antaño, videos extravagantes
de algún rincón lejano del mundo, música freak y de golpe caigo en un video cuyo único contenido visual es un loop de una escena de un juego de autos de carreras
de SEGA (o eso parece) Es nostálgico, es kitch y también es decadente, a eso se
le mezcla la música que ostenta de fondo, una especie de house electrónico tirando
a disco, a la derecha youtube me recomienda varios videos cuya tipografía se sale del estilo clásico y
recuerdan en algún grado a esos textos ridículos que uno escribía en su perfil
del MSN, las miniaturas de estos videos muestran imágenes de animes de
principios de los 90’ con colores bien sobrecargados o retratos futuristas ya
totalmente superados en estética hoy en día. Clikeo sobre unos cuantos, la
mayoría son loops como el primero que vi, pero algunos sí eran videos que a
modo de montaje mostraban escenas de animes muy viejos o videos con algún
incentivo nostálgico kitch, la música es parecida en todos los casos, un estilo
añejo y alterado, una especie de música disco o funky cuya edición final parece
estar siempre a medio camino y que además posee tintes electrónicos. Había
descubierto el Vaporwave, tarde, pero lo había descubierto.
La
estética del futuro para los del pasado, en nuestro presente
En realidad cuando hablamos de Vaporwave nos
referimos a una comunidad virtual de artistas integrada por diseñadores gráficos,
DJ`s y músicos que a principios del 2010 comenzaron a mezclar samples de música
de los 70’, 80’ y primordialmente de los 90’ con géneros electrónicos como el
House, el chill out, el Muzak o el Lounge Music, es decir la variante de la música
electrónica destinada a ser reproducida específicamente en tiendas comerciales,
bares, pubs y cosas por el estilo que tienen un fin de condicionar un ambiente
de relajo y satisfacción para las personas que en ese momento son básicamente consumidores,
también se trata de una música a la que no hace falta ponerle mucha atención y que
es comúnmente denostada bajo la etiqueta “Easy listening” por sus características
excesivamente superfluas, sin embargo, los gestores del Vaporwave tomaron esto
desde una óptica diferente y después de compartir su música en plataformas como
Soundcloud, Bandcamp, Last.fm y 4Chan realizaron dos compilatorios que
anunciaban que el estilo ya estaba anclado en internet, “Eccojams Vol.1” y “James Ferraro: Far SideVirtual”
Maitro tomo como referencia estética a Dragon Ball para generar su obra
Maitro tomo como referencia estética a Dragon Ball para generar su obra
Musicalmente este género
ofrece canciones modificadas mediante ediciones simples en donde se ralentiza o
acelera el audio original o bien se enlaza con otro tema produciendo efectos de
encabalgamiento mal hechos apropósito, siempre con un sonido muy Low-Fi,
Glitcheado y downtempo, incluso con efectos agregados de rever o de cinta de casete
rayado (el que sepa el nombre técnico de ese efecto sonoro que lo diga) No
importa lo sobrecargado en cuanto a edición resonante, parece que nunca es
suficiente. Las canciones originales eran viejos y olvidados hits ochenteros y
noventeros del synth wave o el funk y en
muchos casos se trataba de artistas japoneses que nunca fueron conocidos en
occidente. La gracia de todo esto era el mensaje que escondía y es que el
Vaporwave nace con un discurso autogestivo y anticapitalista. Primero la
mayoría de los trabajos pueden ser logrados mediante softwares de edición de
sonido muy básicos que se pueden obtener en la red de manera gratuita o ser pirateados con facilidad, lo que hace que
el experimento Vaporwave puede ser llevado a cabo por cualquiera que quiera y
segundo el sentido de mezclar todos estos estilos de música tan “chafa” es
tomado como un gesto o símbolo de ironía y burla contra el capitalismo salvaje
de nuestros tiempos. Esto se vería reforzada por toda la estética que acompaña
al movimiento, aunque claro que referentes o intentos parecidos ya se habían
hecho anteriormente como el Chillwave o el Witch House aunque no duraron tanto
como el Vaporwave que en todo caso también bebe un poco de sus fuentes.
Pero obviamente lo que
más llama la atención de este estilo es su estética barroca, fetichista y chillona.
Aunque el discurso del Vaporwave es contra hegemónico es evidente que se vale
de una profunda nostalgia y adoración por todos los elementos kitch de otros tiempos:
Como son las series de televisión, logotipos de empresas antiguas, comerciales,
intros de videojuegos de 8 y 16 bits, o de programas de ordenador en desuso,
esculturas en 3D, gráficos en 3D y películas retrofuturistas. En definitiva se
trata de un lenguaje visual que intenta recuperar lo vertiginoso que fue la
moda de los 90’ con todos los colores y sensaciones que eso pueda llegar a
transmitir para alguien que lo vivió en su tiempo, pero siempre desde un lugar
medio underground en donde la ironía debe calzar con sutileza para dar entender
que no se trata simplemente de una carta de amor al pasado si no del registro
de una decadencia. En definitiva el Vaporwave quiere hacer patente una estética
de la decadencia que remite a una década en que la palabra “Cyber” empezaba a
alzarse como la respuesta a los problemas del ser humano promedio, donde lo
Cyber era un territorio virgen al que sólo algunos especialistas podían entrar
y al que tarde o temprano todos nos adaptaríamos. Una especie de Cyber-Punk que
se construye sobre sus desperdicios y que más que una sociedad distopica nos
señala las ruinas de una civilización, como si fuésemos los visitantes de otro
planeta que están observando los vestigios que quedaron luego del apocalipsis.
El consumismo y las
esperanzas por el progreso como siempre se deshacen por si solas, las escenas
de animes antiguos que parecen ser grabados desde un VHS mal enlazado son el
recurso que el Vaporwave usa para decir “Lo que tuvimos no fue tan grandioso,
pero ahora lo queremos más porque no podemos con el vértigo de las nuevas
tecnologías” o bueno tal vez no lo dice, pero en el fondo es lo que se siente
en la mayoría de sus artistas.
En
un constante universo paralelo
Los artistas del Vaporwave
como ya señale integran una comunidad virtual y realmente no buscan edificar
una carrera eterna en estos derroteros, ni siquiera se presentan en shows en vivo
y el fenómeno aunque sustentable sigue siendo un aspecto de nicho. A esto hay
que sumarle que muchos sólo coquetean con el Vaporwave para ver qué cosas puede
ofrecer el formato y más allá de una o dos canciones no aportan más. Diferente
es el trabajo de los artistas visuales (aunque muchas veces son los mismos
músicos) que han erigido una identidad cada vez más fuerte sobre el concepto,
glitcheando imágenes, elaborando tipografías específicas, creando softwares
para realizar estos menesteres y amparándose siempre en esa idea de evidenciar tras
las imágenes del pasado la decadencia consumista, pero con fascinación por la
nostalgía. Muchas veces el arte Vaporwave va más allá y entre su rareza lisérgica
y extravagante parece ascender como el nuevo Pop Art. Pero bueno, vamos a la
música.
El referente más
conocido es Macintosh Plus con su disco del 2011 “Floral Shoppe”, de hecho el
busto romano que aparece en la portada del disco ya es esencialmente todo un
icono en la cultura del Vaporwave. El disco es una experiencia lisérgica de
casi 50 minutos que a primera escucha más parece un viaje cibernético en acido,
el gran mérito de la artista fue trasladar esa sensación decadente de la
estética interpretándola con perfección en sus temas “mal-bien hechos” el hit
de este disco es “リサフランク420
/ 現代のコンピュー” (que en traducción sería "Lisa Frank 420 / Modern
Computing") que se trata de una remezcla de la canción “It’s your move” de
Diana Ross. El disco tuvo tanto éxito que fue lanzado en formato físico y tuvo
una edición especial en casete para explotar más el formato de la nostalgia. Otro
referente importante es Saint Pepsi, quien más ha explotado la imagen del
Vaporwave llenándolo de Collage de anime, comerciales antiguos (su personaje
está sacado de un comercial japonés de Mc Donalds) fotos mal editadas en paint
a propósito y escenas de animes de los 90 que se repiten en infinitos loops en
sus videos…En fin, musicalmente ofrece un estilo mucho más enérgico que
retrotrae al imaginario que un occidental puede tener de Tokyo o más bien de
una noche en Tokyo, con motos dejando una estela en su paso sobre un cerro de edificios
y letreros de neón que anuncian las nueva tecnología del día, aquí el Witch
House está presente en aquellos temas que servían de incidentales para los comerciales
de la Pepsi, pero también juega con la música disco y específicamente con
artistas que hayan tenido alguna relación comercial con Pepsi o algún otra
corporación, de hecho su tema más famoso “Enjoy Yourselft” es una remezcla de “Off
the Wall” de Michael Jackson, cantante que como sabemos perdió su nariz por
hacerle comerciales a esta marca. マクロスMACROSS 82-99 es otro destacado exponente,
aunque cercano al french house, se vale del reciclaje del synth pop japonés así
como de muchos, muchos elementos y referencias del mundo Anime noventero y de
su cultura que harían que cualquier otaku novicio se perdiera. Ante esto
tampoco puedo dejar de nombrar esos experimentos que están en youtube donde se
mezcla esta aletargada música con escenas de Los Simpson o Seinfield, así como
queriendo estrujar e ironizar aún más con la nostalgia y releyendo el sentido
de estas series.
El Vaporwave conlleva asumir lo vintage con cariño, pero a la vez con
decepción, quizás para enrostrarte que todo tiempo pasado no era tan genial
como creías, en todo caso llegó justo a tiempo, antes no hubiese tenido
sentido, este revival por lo obsoleto y la fetichización estética sólo pueden
ser asumidas por un público que vivió aquello y que hoy lo recuerda con cierta
distorsión. Quizás a eso se debe el éxito o al menos el reconocimiento que el
estilo ha tenido por internet, su natural y conveniente nodriza que a la vez
nos parece un constante universo paralelo en el que podemos despojar nuestra felicidad
y tristeza.-
Y por supuesto el estilo dio pie a un montón de parodias músicales hacía otros artistas y grupos convirtiendo sus temas en Vaporwave con resultados no siempre efectivos, aquí la versión "Mujeres y cerveza" del grupo Alegría.
hace algo asi como dos años "conocí" -intrusiando por el Internet- a un beatmaker chilensis con influencias vapowabe. por aquel entonces no tenia idea de que lo que el hacía era vapowave o algo asi. solo se me hizo interesante su propuesta. y ahora que acabo de leer el post y escuchar por ahí algunos temas todo encaja -por decirlo de un modo-.
ResponderEliminaradjunto un enlace del tipo en cuestión:
https://www.youtube.com/watch?v=94BD1LJ1YIE&t=38s
bacán el post y el blog en general. siempre pillo cosillas interesantes con las que matar el tiempo un rato.
Tanke share. Gracias por el comentario. Investigando sobre el tema descubrí unos mexicanos que se llaman sentidos apuestos que utiliza canciones latinas conocidos por todos en clave Vaporwave, aunque no son tan buenos como otros artistas esta bueno el intento de llevarlo a terrenos más autoctonos. https://www.youtube.com/watch?v=A4maCCM8gME&t=186s
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