sábado, 10 de enero de 2015

Sobre Charlie Hebdo, la libertad de expresión y la intolerancia



Es curioso, pero para muchos un año se mide más por la cantidad de tragedias que pesan sobre él que por otras cosas más agradables y eso lo podemos notar en los recuentos que los noticiarios o programas periodísticos hacen en Diciembre sobre las noticias más “sobresalientes” del año,  es un pesimismo amargo no hay duda, pero el atentado en Paris ocurrido el Miércoles 07 de Enero  fue para muchos un estreno cruento del  2015, con esto nos despabilamos y hacemos frente a la primera tragedia que este año hizo explotar los principales noticiarios centrales del mundo para enfocar la atención de todos en lo que ocurrió en el país del Baguette, por supuesto que tragedias ocurren a toda hora, masacres a cada segundo, pero como ocurrió en Francia y por las condiciones en que todo se dio hay una intención urgente de muchos países en exponer este horrible suceso como una amenaza mundial que afecta valores mayores como la libertad de expresión.


Primero contextualicemos, el Charlie Hebdo es un semanario satírico que se vale en sus portadas del humor gráfico mordaz en el que hacen mofa de políticos, personajes famosos y fundamentalismos religioso, es un pasquín de ideología claramente izquierdista y por lo tanto deberíamos decir que se encuentra bien alineada con el gobierno actual del presidente  Hollande un experimentado socialista (o sociolisto a estas alturas del partido) quien ya ha admitido que Francia es un punto rojo en el mapa mundial actualmente, que los ataques puede que no cesen y que hay que estar preparado para lo peor, no por nada las calles de Paris se atestaron de seguridad y el gobierno ya pidió la intervención de las fuerzas especiales GIGN quienes fueron finalmente los que dieron caza a los perpetradores del atentado a las oficinas editoriales de Charlie Hebdo.  

 Los sobrevivientes ya han anuciado que el periodico volverá en un tiraje menor y con el mismo humor acido de siempre.
 
Algunos columnistas han acusado a Charlie Hebdo de incitar a la islamofobia y de provocar un racismo desmedido entre la población Árabe y la Francesa, una incitación que surge  en momentos donde ciertos sectores sociales de Francia alertan sobre bandas de delincuentes que operan en un extrarradio que no puede ser tomado por policías y que actúan con extrema intolerancia, en circunstancias donde en los suburbios de Toulon se ven banderas verdes donde puede leerse “Dentro de 20 años Francia será una República Islamica” como si estuviesen vaticinando el argumento de la última novela de Houllebecq llamada “Soumission” en la que Francia termina convertida en un estado Islámica mega dogmático, el mismo escritor ya ha plasmado en anteriores declaraciones su repudio a esta religión acusándola de ser la más tonta de todas y por cierto el último número publicado por la revista lo tenía a él caricaturizado. Esta somera descripción de situaciones nos da a entender que las heridas colonialistas y sesgo multiculturales siguen estando presentes con gran brecha en el día a día de Francia, existen roces y desconfianzas que con este tipo de actos sólo hacen hervir más la olla y por más que las autoridades pidan “unidad y fraternidad” si había un desastre interno en el país en que básicamente un grupo étnico/religioso/social pisoteaba a otro no se puede ser ingenuo y pensar que todos se tomarán con la misma altura de miras los chistes de la Charlie Hebdo.
 

Aún así la revista no tiraba sus dardos contra el mundo Islamista en exclusiva y en realidad no pretendía hacer sucumbir a las religiones porque sí sino que atacaba el dogmatismo que llevaba a fanáticos a cometer actos como los que la propia revista se vio envuelta y aunque el texto de más arriba puede sonar a un “se lo buscaron” no estoy cayendo en un axioma tan simplón, tan sólo estoy agudizando todas las visiones posibles y hay que entender que en Francia el racismo es tan real de un lado como del otro igual que en Chile o Argentina, no por ser una potencia (medía decaída) del primer mundo no va  arrastrar problemas domésticos así de feos, esto generará con facilidad que el ataque beneficie gratuitamente el odio masivo de Francia hacia un sector y muy pronto -apoyado por otros medios hegemónicos como la CNN- el mundo entero condene una religión aunque la comunidad Musulmana francesa ya salió al paso para condenar el acto y recordar que uno de los policías que los extremistas mataron al momento de escapar de la redacción era justamente musulmán. Pero el odio ya estaba instaurado por los dos lados y los yhidistas que realizaron la ejecución del acto tenían una estrategia más elevada entre manos:


*“Precipitar el enfrentamiento y la radicalización de fracciones importantes de la población. Charlie Hebdo beneficia de un capital simbólico pero importante en la izquierda: Éste todavía se considera antirracista y encarna la «libertad de expresión» entre muchas personas. No ha sido atacado ni Le Figaro, ni Le Minute”

Le figaro y Le Minute son dos periódicos de Derecha que hacen gala de la intransigencia propia de este sector político, el objetivo de instrumentalizar este ataque a un periódico de izquierda con ciertas ideas progresistas busca: 

“(quel) dique antirracista de izquierdas salta, entonces es Europa entera la que bascula en el desencadenamiento de una violencia racista simbólica y física en la cual los musulmanes son las primeras víctimas. En este escenario los guerreros tafkiríes (fanáticos ultrareligiosos que tienen su propia lectura del Islam y que han sido asociados a la red de Al Qaeda y por consiguiente a innumerables atentados terroristas de los últimos años en varios sectores de Europa) que fantasmean con ser defensores del Islam esperan que la población musulmana entonces violentamente oprimida, irá a buscar protección en ellos. Un poco como los sionistas siempre dispuestos a instrumentalizar las olas de antisemitismo para justificar la existencia del Estado de Israel y que la población judía oprimida se refugie en ellos, pues esto es lo mismo”

La autora del texto concluye su análisis dejando en claro que los únicos beneficiados con este hecho terminan siendo los verdaderos islamofobicos y los fanáticos musulmanes que recrudecerán las relaciones en un aire que ya venía denso. El mar de información (mucha realmente intrascendente y amarillista) como siempre no suele aportar mucho a estas deducciones estratégicas y todo se termina convirtiendo en un blanco/negro donde es fácil echar a todos en un mismo saco, aún sigue siendo pronto para sacar reales conclusiones que tornaran perfilándose según el ritmo de los sucesos se disipe y cuando la tragedia ya haya sido más asumida por la población, sin embargo, uno de los puntos fuertes y simbólicos que este ataque generó fue la casi espontanea manifestación general sobre el ataque a la libertad de expresión.
 

"The siege" aunque se trata de una película gringa y pochoclera de 1998 nos puede transportar a una realidad muy, muy cercana. 

Los medios han denominado este suceso como un ataque feroz a la libertad de expresión y han acusado incluso más que la matanza misma el hecho de que esto termine siendo un precedente para generar autocensura en los medios de comunicación, vaya, pero que lejos ha quedado ese absurdo y maqueteado alegato de Sony ante los hackers de Norcorea por el sabotaje a su correo privado aduciendo que se trataba de un ataque a la libertad de expresión, esto, recordemos, por el revuelo que causo el estreno de la película The Interview hace unas pocas semanas, film entretenido, pero muy menor en donde dos periodistas viajan a la comunista Norcorea con la intención de matar al líder de aquel país. Lo que ocurrió en Francia se ha erigido por todos los caricaturistas del mundo y en general por todos los que trabajan en los medios como columnistas o analistas como un día negro para la libertad de pensamiento, y es que por una cosa de resguardo por algún tiempo los dibujantes de Francia se lo pensaran dos veces antes de estampar una burla o sátira a algún suceso de envergadura, por supuesto esto no le gusta a nadie ya que cuando la censura se empieza a vivir por el miedo caemos en un estado de pánico del que apenas nos podemos reconocer como personas. La bandera de Francia ha estado en lo correcto al erigir como lucha la vuelta a la libertad (en todas sus vertientes) más que una lucha contra el terrorismo (al menos públicamente ha sido así) es una medida sabía para estos primeros días aunque realmente Francia se ha consolidado como un aliado más de Estados Unidos en este fuego cruzado, por nada CNN respaldo de inmediato a Francia al publicar en una columna que los dibujos de Charlie Hebdoe eran necesarios, esta bien, se entiende como un gesto de solidaridad con el gremio, pero por favor no nos vamos a creer que una cadena imperialista y sobre todo de derecha como CNN abogue por esa clase de libertad de expresión, es un falso apoyo que quiere virar la atención a otro lado.

Pero dejando de lado los conflictos geopolíticos no está de más entrar al análisis de hasta dónde debe llegar el humor dentro de un contexto social lleno de roces por cuestiones de identidad y es que en definitiva si es que hay una misión social dentro del humor esta debe ser identificar o acusar aquello que el poder  establecido te prohíbe decir, la válvula social siempre se ha constituido en el humor y en los momentos de la historia en que la opresión se ha vuelto común siempre ha existido alguien que con inteligencia ha sabido denunciar las cosas por medio del humor. El dibujante chileno fiestoforo describe el rol social del humor – en este caso gráfico – de la siguiente forma: **“La caricatura es exageración por definición por lo tanto no creo que sea graciosa con resguardos. Goya dibujaba a los seres despreciables de la sociedad con las bocas abiertas, porque eran como animales y dejaban lucir su interior. La risa hace lo mismo con uno. Por eso, así me imagino el humor gráfico, grotesco, desubicado y ostentoso, como una carcajada en un funeral”.

El arte también constituye un baluarte para la libertad de expresión, la imagen corresponde a la obra "La ejecución" de Yue Minjun exponente de la corriente artistica del realismo cinico en China.


El humor, la sátira no tiene reparos en atacar con alevosía un sector, es incluso necesario (como dicen los de CNN) muchas veces para el despertar social y en una realidad como Francia llena de problemas educativos y sociales no puede callar o no puede no existir expositores de esta índole sobre todo con una tradición amplia en este campo, pero hay algo interesante que tocar y es que esta clase humor que muchas veces sirve para denunciar sirve sobre todo cuando se ataca a quien está al mando de la situación, al mando del poder así tal cual lo hacían los bufones en la edad media cuando se burlaban del rey y de la corte diciendo entre líneas lo que muchos del pueblo le querían decir al rey. Cuando Pinochet respondió en una entrevista sobre el cuerpo de los detenidos desaparecidos y él respondió con un chiste cruel todos le celebraron el suceso, pero para la sociedad en general fue como una patada en los huevos, cuando South Park trato el tema de la libertad de expresión en uno de sus capítulos haciendo referencia justamente a un posible conflicto con los extremistas musulmanes debido a una caricatura que se hizo de Mahoma el capítulo tuvo la venía del público porque se instalaba desde la otra vereda para expresar con humor negro una difícil discusión. En ese sentido Charlie Hedbo estaba en una posición de poder frente a otros diarios y su forma de satirizar a los fanáticos musulmanes puede ser interpretada por algunos como una provocación abalada por el mismo gobierno Francés ¿qué se puede decir al respecto?


                    De todos modos cuando el terror invade, la libertad de expresión se fortaleze.


Ninguna matanza es razonable y por supuesto ponerse  a pensar que todo esto tiene una justificación es iluso, sin embargo, queda a criterio de cada uno sentir hasta qué punto se usó o desusó el concepto de libertad de expresión y hasta dónde nos llevará este terrorismo que pareciera acabar de disparar una bala de triunfo en el primer mundo. Personalmente siento que el acto encenderá con más fuerza el deseo de elevar el valor de libertad a los que realmente sientan que quieran decir algo y no amedrentarán a aquellos que vean en esto un oficio digno de esfuerzo y sacrificio llevando los baluartes de la libertad de expresión a su propio terreno y es que en Latinoamerica no vivimos en un paraiso de tolerancia precisamente.-

Esta simple opinión refleja un poco las lecturas que he llevado sobre lo ocurrido en Paris, y los siguientes link son de interes general para tener un espectro más amplio del hecho:

*


   
**
http://eldesconcierto.cl/humor-grafico-y-sus-limites-malaimagen-christiano-y-fiestoforo-opinan/

Yo no soy Charlie Hebdo: 


Se arrugará Francia:



Se expande la Islamofobia por toda Europa:
http://internacional.elpais.com/internacional/2015/01/07/actualidad/1420669006_872432.html

Charlie Hebdo el trazo hecho trizas:
http://www.reporterosasociados.com.co/2015/01/charlie-hebdo-el-trazo-hecho-trizas/


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