domingo, 2 de diciembre de 2018

Series para ver, volver a ver y pensárselo mejor antes de ver: La obra de mi vida



Esta vez revisaremos algo distinto, una webserie. Sí, aunque hace tiempo las webseries  han encontrado su pequeño nicho en youtube, aún siguen pareciendo ante el público general sólo un ensayo o experimentación de una serie real. Más de alguna ha sido tomado por una productora y convertida en una serie de formato convencional como es el caso de Cobra Kai”, otras incluso, como “Gringolandia han sido seleccionadas por netflix para transmitirse  por su plataforma. En fin, el servicio de streaming es variado y en esta oferta infinita echar mano a las figuras de youtube para sacar adelante un producto audiovisual no es raro. No obstante, la siguiente serie que revisaremos tiene bastantes ingredientes para ser uno de esos productos de culto de la internet de nuestros tiempos. Hoy, en te lo resumo así no más…La obra de mi vida.
 


Llegar a los 30 con ese vacío existencial

¿Qué es una webserie? El formato que define a estos productos estriba en que se trata de  un audiovisual que se transmite originalmente por internet (obvio), que corre con un tiempo menor a las series convencionales, muchas veces suelen durar 8 o 10 minutos (hay excepciones, claro, como la antológica “Malviviendo”) y el género primordial en el que se cobijan es la comedia y el absurdo. Si hacemos un rastreo rápido podríamos decir que los Monthy Phyton más o menos pusieron (sin querer) los primeros ladrillos para darle vida a este formato, ellos en sus sketch incluían elementos random que cuarenta años después son pan de cada día en el internet, el llamado shitposting

Ver una webserie no suele tomar más de una hora, siempre se distribuyen en una tanda de 10 o 12 capítulos (se suelen estrenar todos al mismo tiempo) aunque existen excepciones de canales que van lanzando capítulos en periodos prolongados (esto ocurre especialmente con las web series animadas como “Dr Goku” o “Lorenzo Delgado”) La tendencia actualmente parece ser crear historias con un desarrollo en su trama, y no sólo conjuntos de sketch. “La obra de mi vida” es una webserie que de cierta manera busca combinar aquellos elementos: el shitposting, las referencias a la cultura popular y una historia simple que a ratos ironiza sobre si misma, pero antes, de dónde surgió este proyecto.

Te lo resumo así nomás, es un canal de youtube Argentino que ha tenido muy buena recepción desde el año pasado aproximadamente. Se basa en – como su nombre lo dice – realizar resúmenes simples y jocosos de películas o series emblemáticas. Quizás por lo directo de su concepto, el buen manejo de edición de su principal creador Jorge Pinarello o simplemente por suerte, el canal ha sido muy popular en Latinoamérica. Gran parte de su contenido apunta a elementos de la cultura pop, series emblemáticas de los noventa y películas bien chafas o no tanto, Jorge mediante una voz rasposa y una locución irónica da cuenta de los aspectos ridículos o descaradamente non sense que tienen las tramas de las series o películas que resume. Obviamente al ser un canal argentino muchos de sus resúmenes son sobre telenovelas o series representativas del país como “Chiquititas”; “Mi familia es un dibujo” o “Cebollitas”. 

A principios de esta año el equipo detrás de Te lo resumo así no más creó un proyecto mediante la plataforma de financiación colectiva Idea.me. Se trataba de una serie, posteriormente devenida en webserie llamada La obra de mi vida. La trama cuenta los anhelos de Natalia Maldini por darle sentido a sus treinta años de vida. Natalia, quien se sostiene de varios elementos autobiográficos para contar su historia, es una abnegada actriz que la rema trabajando en spot publicitarios, prácticos de estudiantes de cine y obras de teatro que nadie va a ver. Un día tiene una epifanía, a sus treinta años no ha logrado realizar nada trascendental, nada por la que el mundo la vaya a recordar, no tiene legado y no se siente valorada por su entorno, entonces es cuando pone en marcha la realización de la obra de su vida aunque ni ella misma entienda muy bien qué es lo que quiere hacer, esa muletilla se repetirá constantemente a lo largo de los diez capítulos de la serie.

Natalia vive en una constante inseguridad sobre el valor de sus decisiones, siempre la dejaron hacer lo que quisiera y por lo mismo nunca pudo revelarse ante nada, dentro suyo grita un alma rebelde que busca hacerse notar por sobre su personalidad pasiva y complaciente. La esquizofrenia de Natalia, sus sueños rotos y sus anhelos imposibles son la cuerda que une todos los capítulos. Para Natalia (la actriz, no el personaje) el incentivo detrás de esta serie nace de la crisis que todo artista independiente vive en algún momento: ¿Realmente mi trabajo sirve de algo?: Jorge y yo estábamos metidos en el circuito del teatro independiente y muchas veces va muy poca gente. Entonces estaba inmersa en esa crisis de ‘estoy haciendo algo para muy pocas personas’ y de lodifícil que es vivir del arte. También sale de la inquietud de hacer un proyecto propio, que nazca de mi deseo”



Hey, entendí esa referencia


Aunque la historia de la serie parezca orbitar sobre angustias existenciales post treinta años, definitivamente brilla por su pastiche. La serie es un colofón de referencias, diálogos, situaciones, guiños y parodias que sólo pueden caber en el universo caótico de internet. Desde el principio de los capítulos, con intros que recuerdan a series de los noventa, “La obra de mi vida” hace notar que es un producto propio de la internet. Lleno de diálogos que explotan el metalenguaje y de momentos desopilantes que sólo entenderán aquellxs que se criaron viendo la televisión. No deja de ser una carta de amor hacía todos esos programas, sitcoms o películas históricas, pero al mismo tiempo, no se siente que apelen a la nostalgia forzosamente, o que jueguen con elementos clichés de ella, resulta más en un homenaje-parodia.

El resto de los personajes también le da mucho color a la serie, fuera de las histerias y frustraciones de la protagonista (que expone en casi todos los capítulos de mejor o peor forma) El elenco también lo conforman su familia convencional, con un papá parsimonioso que explota de vez en cuando un ridículo lado dramático, una madre que no le da bola a nadie y un hermano quejumbroso, todxs fanáticxs de un equipo de fútbol que nunca gana nada. La otra parte fundamental del elenco la conforma el grupo de teatro de Natalia, compuesta por personajes estrafalarios y encantadores.  Rene, un actor que vive dramatizando su vida. Casper  imitador oficial de Borges, sostén primordial para lanzar frases rebuscadas y absurdas. Chapi un improvisador bastante distraído y por supuesto, Jorge (el mismo de Te lo resumo así nomas) novio de Nati y ortiva profesional.

 


 Este disparatado grupo logra dar con los momentos más desopilantes y anecdóticos de la serie. El capítulo en que se sumergen en la creación de la obra y no saben cómo detener las referencias y las meta referencias es brillante. Así mismo el contexto en que se desarrollan (una sala de teatro llamada Batallon Militante a la que no va nadie) les cae como anillo al dedo a esta compañía de teatro que no parece tener un norte seguro. 

Los diálogos sin sentido y referenciales son el elixir de esta serie que encanta por su simpleza y dedicada elaboración. Es un producto independiente que hace mofa justamente de la mayoría de los problemas que realizadores independientes tienen. No se alimenta de gags, ni crea humor de situación, sino que es un humor contextual y metareferencial. La obra de mi vida es una pequeña joya dentro de youtube y seguramente por su rápido éxito ya esta puesta en marcha una próxima temporada. En el futuro, cuando la gente consuma únicamente este tipo de cosas, esta serie estará en el lugar sagrado que se merece.-

Los dejo con un video que recopila todas las referencias de la webserie

 


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