No les pasa de repente que están en su casa buscando una tarjeta de debito
que se les ha perdido. Buscan con preocupación esa tarjeta porque saben que es
un maldito bien esencial en esta vida de mierda y entonces, en el caos y ya con
la mínima esperanza de encontrarla en algún rincón de la casa, de la nada, caes
en la cuenta que LOST finalizó hace 10 años. El tiempo es un chiste.
LOST, esa serie sobre un grupo de náufragos que caen en una isla súper
bizarra (y sí, eso de una isla rara ya se vio en los 60’ con la excelente serie
The Prisioner) dio pie junto a The Sopranos a lo que mucha gente llamó “una
nueva era dorada de las series yankees”. De la mente de JJ Abrams - mejor
conocido como el hombre que resucito para luego apuñalar horriblemente la saga
de Star Wars – esta historia que mezcló desde la paranoia 20/11 hasta viajes en
el tiempo, lo tenía todo y esa fue su virtud y maldición. Yo la descubrí en la
mitad de su primera temporada gracias a un articulo en una revista de cable de
la época, lamentablemente el canal que la transmitía era súper irrelevante,
creo que AXN (léase y-ex -en) y siempre me costaba sintonizarla, pero
entonces Canal 13 Chile metió el golazo de transmitirla todos los Domingos en
horario estelar y ahí tuve mi agasajo, por lo menos hasta el final de la
segunda temporada, luego vinieron los Torrents.
Debo admitir que LOST fue mi serie “live action” predilecta por un buen
tiempo, realmente sentía una gran expectativa frente a cada nuevo episodio y
como buen ñoño me embadurné de su mitología mediante foros de internet (la
mayoría españoles) señalando los innumerables easter egs de cada episodio y
enarbolando teorías junto a otrxs fanaticxs, teorías que como suele pasar, eran
descabelladas, pero a la larga más divertidas que la resolución real que tuvo
la propia serie. Y nada, me pinto hablar de LOST, y no le daré muchas vueltas,
realizaré un pequeño (o no tan pequeño) comentario sobre cada una de sus
temporadas, apuntando específicamente a cuándo, a mi parecer, la serie con todo
el maravilloso destello que desplego en su inicio poco a poco se fue, valga la
ironía, perdiendo sobre si misma.
TEMPORADA 1
Creo que no existe mejor ejemplo de guion sobre cómo armar un excelente
inicio de historia para una serie de estas características que el que se ofrece
acá. La premisa no es tan compleja, un grupo de sobrevivientes de un vuelo
aéreo caen en una isla que inmediatamente se muestra como un lugar hostil y
lleno de misterios. La serie contaba con un cast de protagonistas demasiado
diverso, pero los principales guionistas Damon Lindelof y Carlton Cuse se las
arreglaron para darle importancia y momentos estelares a todxs mediante
episodios que recurrían al recurso narrativo del flashback, de esta manera, en la
mayoría de los capítulos la trama se dividía en dos partes, por un lado veíamos
las aventuras de estos náufragos en la terrorífica isla (cuyo suspense aumentaba
de forma magistral) y por otro se nos mostraba una parte del pasado del
personaje sobre el cual orbitaba gran parte del episodio, de esta manera
conectábamos con la historia en todos los frentes posibles, ya que esos
flashback solían dotar al cast de una gran profundidad, entonces, si en la isla
se comportaban de forma unidimensional, en su respectivo flashback te
encontrabas con grandes sorpresas.
En lo personal, el protagonista principal Jack Shepard (Matthew Fox) nunca
me gusto, su historia de trasfondo me parecía una mierda, el tipo únicamente le
tenía resentimiento a su padre ¿por qué? Nunca me quedo tan claro ya que el
Papá nunca se mostró como un verdadero monstruo frente a él, más bien Jack era
un puritano desagradable que hasta el último capítulo de la serie no dejo de
dar la lata con sus lloriqueos, un idiota con complejo de Superman y es muy
loco que ese tipo de héroe actualmente estén tan en deconstrucción porque
simplemente ya no conectan con la audiencia, pero para la época Jack ya me
parecía insoportable y a pesar de que fue el que tuvo más capítulos centrados
en él a lo largo de toda la serie, su protagonismo realmente nunca fue el
gancho.
El resto me parecen en general muy buenos, especialmente en esta primera
temporada, incluso aquellxs que no tenían un pasado tan interesante como la
pareja heterosexual de asiáticos, el afroamericano y su hijo o lxs hermanitxs
lindxs, igualmente consiguen conectar sus historias con el presente de la isla,
teniendo un desarrollo orgánico, enfrentando sus propias problemáticas y
cerrando sus respectivos arcos de una forma consistente. Después tenemos otros
personajes geniales como Kate (Evangeline Lilly) que en esta primera temporada
realmente se luce aunque muchxs dirán que fue una Mary Sue, Sawyer (Josh
Holloway) un encantador estafador profesional que en esta temporada es el
principal detonante de los conflictos internos de la isla, Sayid (Naveen
Andrews) quizás quien tiene el pasado más complejo hasta ese momento, mi
querido Hurley (Jorge García) que de ser
un alivio cómico tuvo un capítulo genial donde la perspectiva del personaje
cambió rotundamente al punto de conectarse con la mitología de la isla y por
supuesto John Locke (Terry O'Quinn) cuyo pasado presentado en los primeros
capítulos fue el mejor gancho para seguir viendo la historia, prácticamente un
pobre desgraciado (que sí tuvo un padre de mierda) que antes del accidente se
movía por el mundo en silla de ruedas, pero que al caer a la isla pudo milagrosamente
volver a caminar. Es este personaje para mí el verdadero protagonista, con un
pasado muy interesante y la búsqueda de un propósito que constantemente nos
permitía a lxs espectadores conocer indirectamente más misterios de la isla,
como esa mítica escotilla que fue el principal foreshadowing de la
segunda mitad de la temporada, o el monstruo, que hasta ese momento de la
historia no era más que un amenazante ruido, pero que siempre que se sentía
sabías que todo se iría a la mierda. Locke por otra parte es el recurso con que
los guionistas introdujeron cuestiones más existenciales y filosóficas, quizás
por ello tanta gente quiere al personaje, a las finales termino representando
la fe, la misma que tantas veces lo movilizó a la acción y que también termino frustrándolo
horriblemente.
La primera temporada fue genial, pese a que fue la más larga y que uno que
otro capítulo no consiguió resaltar tanto, la historia fue llevada de manera
coherente y siempre enganchando con diferentes recursos narrativos simples,
pero bien ejecutados. En cuanto al final de temporada es maravilloso, explosivo
e inesperado, nos dejó a todxs con ganas de más, y con el listón bien en alto.
TEMPORADA 2
En esta temporada la cosa sigue muy bien, no tengo muy claro, pero al
parecer JJ Abrams ya había dejado la serie en manos de sus guionistas y gran
parte de la dirección se la llevo Jack Bender quien mantendría un estilo más o
menos estándar para una serie de tal factura. Esta temporada como buena secuela
redobló un poco todo lo que había hecho la primera: más misterios, más intrigas
y más flashbacks sorprendentes. Con un arranque magistral en donde se nos
presenta a Desmond (Henry Ian Cusick) un personaje carismático y querido por
lxs fans (pese a que en esta temporada sólo aparece en el primer capitulo y en
los últimos dos) la primera tanda de episodios se puede llegar a sentir meh,
pero creo que esa lentitud es necesaria para ir armando una tensión escalonada.
Sumado a todos los peligros de la temporada pasada, los personajes principales
ahora se enfrentan a un nuevo escenario, una especie de bunker en donde deben
presionar sobre un viejo ordenador una secuencia numérica cada cierto tiempo o
si no la isla explotará. Además, se empieza a introducir de forma inteligente y
colateral a la misteriosa corporación DHARMA lo que dio para explotar más y más
teorías conspiranoicas.
Dos cosas arriesgadas que esta temporada probó, una le resulta bien y otra
no mucho, empecemos por el desacierto: Frente a la necesidad de ampliar un poco
más el elenco para así empezar a meter más drama e ir fragmentando al cast
original (algo necesario), agregaron a la historia a otros sobrevivientes que
iban en la cola del avión y que se estrellaron en otro punto de la isla, aquí
se presentan algunas cosas interesantes, pero que en retrospectiva terminan
siendo poco relevantes. Tenemos a Ana Lucia (Michelle Rodríguez) haciendo el
papel de chica ruda, muy parecido al de Kate, pero que fue terriblemente
desaprovechada. Tenemos a Mr. Ecko (Adewale Akinnuoye-Agbaje) una especie de
Locke 2.0 que fue súper llamativo y que de algún modo iba a formar parte
esencial de la historia, pero que también fue desaprovechado. Aún así el
capitulo en donde este nuevo grupo de náufragos se presentan, es genial, un
episodio de pura adrenalina que sirve para introducir de manera excelsa y
grafica una amenaza que en la primera temporada fue más bien esporádica, Los
Otros, un grupo de nativos de la isla que se presentaban en momentos
cruciales de la primera temporada, pero que gracias al capítulo “The other
48 days” pudimos tomarle el peso real de su amenaza mediante la perspectiva
de este grupo de sobrevivientes de la sección trasera del vuelo. Irónicamente
el personaje menos relevante de este nuevo grupo de náufragos, Bernard (Sam
Anderson) nos otorga uno de los momentos más emotivos ya ayuda a cerrar el arco
de otro personaje completamente secundario, Rose (L. Scott Caldwell) una mujer
que durante toda la primera temporada tuvo fe en que su marido seguía vivo,
pues no habían encontrado su cuerpo. El reencuentro entre la pareja es
bellísimo y muy bien logrado, no son importantes para el resto de la trama,
pero hey, se mantienen hasta el final de la serie.
El problema de introducir a estos nuevos personajes, no es que sus
historias no fuesen interesantes, es más, fueron esenciales para que esta
temporada agarrara vuelo luego de que inevitablemente las historias del cast
original empezaban a desgastarse. No obstante, cuando te enteras de que fueron
sacados de la serie por razones de orden “extracurricular” (líos con la ley y
problemas con el equipo de producción) es un poco decepcionante. Pero vamos a
lo que sí fue el súper acierto de esta temporada y que un poco ayudó a igualar
a la calidad de la primera. Sí, Los Otros fueron una amenaza mucho más
presente, pero quien se llevó las palmas fue Benjamin Linus (Michael Emerson)
quien según cuentan sólo fue contratado para una tanda de capítulos, pero su
interpretación tan ambigua maravilló a los productores que decidieron darle un
papel mucho más importante y que sería definitorio para el resto de la serie,
como líder de Los Otros.
Una temporada muy buena, que empieza a mostrar cierto desnivel en la
profundidad de algunos personajes (ya muchos flashbacks empiezan sentirse
irrelevantes) pero que igual mantiene un nivel consistente en cuanto a guion y
un final tan o más dramático, potente y fulminante que el de la primera
temporada.
TEMPORADA 3
Aquí es donde todo se va a la mierda. Incluso los mismos guionistas en
entrevistas posteriores han dicho que esta temporada fue el punto detonante en
donde se dieron cuenta que debían construir YA un final para la serie.
Evidentemente la cantidad de misterios que habían abierto empezaban a sumarse
en demasía, cargando una mochila de argumentos que no iban a ningún lado. Del
mismo modo casi todos los personajes originales pierden totalmente su gracia y
pasan a convertirse un poco en caricaturas de si mismos, siendo los casos más
dramáticos los de Kate y Sawyer que el guion los involucionó de una forma
terrible sólo para favorecer el avance de la trama. En esta temporada es en
donde se encuentran los peores capítulos de la serie, desde uno que se enfoca
en los tatuajes de Jack (los mismos guionistas odian ese episodio) otro en
donde arreglan una furgoneta de los años 60´ y otro capitulo mucho peor en el
que se nos presenta a dos personajes que nunca tuvieron un propósito claro,
Niky y Paulo, quienes incluso en su propio capitulo terminaron muertxs (y de
una forma súper horrible, pero a nadie le importó) si la serie quería
experimentar con nuevos estilos de historia, hubiera sido interesante que se la
jugaran con un flashback del perro Vincent otro personaje recurrente en la
serie y que de algún modo se ganó su lugar (y sí, Vincent protagoniza un
pequeño clip, pero no es un capítulo).
Pese a esto, hay cosas que destacar. Primero, Locke y Charlie (Dominic
Monaghan) consiguen un gran desarrollo argumental, el primero conectando cada
vez más con la isla, con sus habitantes y con la mística del lugar, dándole un
camino diferente y complejo que al resto de sus compañerxs, por su parte
Charlie quien fue querido desde la primera temporada y que había tenido un
desarrollo satisfactorio en la segunda (pese a que repite un poco los tópicos
de la primera), en esta tercera se lleva las palmas, con un final emotivo y
hermoso.
Esta temporada se enfoca mucho en el estilo de vida de Los Otros, como
espectadores conocemos más de esta sociedad mediante dos personajes concretos:
Benjamin Linus que en todo momento se siente como el verdadero villano, aunque
con muchos matices, al mismo tiempo también se muestra como alguien al que le notamos
en distintos momentos que todo se le está descontrolando. Y también tenemos a Juliet
(Elizabeth Mitchell) que arranca de forma notable, sin ser una copia de la Kate
de la primera temporada, con sus propios dramas y dilemas (fue llevada a la
isla engañada, lo que muestra…que no toda la gente que pertenece a Los Otros
está tan conectada a la isla), pero lentamente termina convirtiéndose
únicamente en un interés amoroso de Jack, sin mayor sustancia. Por otro lado
tenemos la incorporación de Desmond al cast principal ¡y de qué forma! Le dan
poderes con los que puede ver flashes del futuro. Pese a que el trasfondo de
este personaje es algo esquizofrénico y se siente que lo van armando a la
fuerza, por casualidad o no a las finales Desmond encaja perfecto en toda la
mística más profunda de la isla, sin ser una copia de Locke, por supuesto. Ah y
en esta temporada es donde se deshacen de Mr. Ecko de forma descafeinada e
Insulza.
¿Cómo arreglar este desastre y empezar a encaminar un final apropiado a
esta historia? No sé si a este punto lo tenían tan claro, pero el último
capitulo de esta temporada intenta enmendar un destino claro (aunque cada vez
aparecían más y más inconsistencias de guion) dándonos un plot twist intenso
que en su momento dejo a todxs boquiabiertxs. Como casi todos los capítulos
este se divide en un “flashback” y en la historia principal de la isla, en esta,
hay un enfrentamiento entre Los Otros y el grupo de Jack, saliendo victoriosxs
y haciendo contacto con un barco, lo que deja entre ver que muy pronto serán
rescatadxs. A su vez el flashback es uno donde se muestra a un Jack depresivo
que no hace cosas muy interesantes, hasta la última escena en donde se devela
que ese flashback era en realidad un flash forward y que tanto el como Kate
consiguieron salir de la isla, pero Jack está desesperado por volver. Nada, fue
genial verlo la primera vez, pero con una temporada tan pobre y llena de
tropiezos era evidente que la serie perdió a este punto gran parte de su
popularidad.
TEMPORADA 4
Esta temporada se vio afectada por la huelga de guionistas de Hollywood,
por lo que es la más breve de todas con solo 14 episodios (recuerden que
veníamos de temporadas que abarcaban entre 25 y 20 capítulos, una locura) el condensar
la temporada en un número menor de episodios, haya sido producto de la huelga
de guionistas o no, la verdad que jugo a favor ya que cada episodio consiguió
ser más concreto y relevante por si sólo. Como el pasado y el presente del cast
principal no importaba mucho, aparecieron los flash forward que abrían otro
misterio ¿quiénes salieron de la isla?, ¿por qué Jack quiere volver?, ¿qué pasó
con el resto? Todo esto se desarrolló de forma provechosa con capítulos que
siempre tuvieron su cuota de intensidad, acción y poco a poco se empezaban a
develar los misterios, no siempre de la forma más satisfactoria (o si quiera
coherente a veces), pero al menos ya teníamos una que otra respuesta.
Los flash forward trajeron frescura a la narrativa, pero también hubieron
otras cosas que llamaron la atención, principalmente tres de los mejores
capítulos que la serie ha tenido. “The constant” centrada en Desmond, un
episodio emblemático, romántico y al mismo tiempo tenso que pone sobre la mesa
el tema de los viajes en el tiempo (que se había insinuado hace mucho) y que
además le da relevancia a uno de los nuevos personajes de esta camada, que
inmediatamente llamo la atención del fandom al sentirse como alguien original
para ese momento, Faraday (Jeremy Davies) un físico que parece genuinamente
interesado por los misterios de la isla por lo que es un regocijo verlo
experimentando. "The Shape of
Things to Come" es un capitulo tremendo, lleno de acción y emociones a
tope, centrado en Benjamin Linus, pero ya no en flash back sino en flash
forward, te muestra una conexión más ágil de éste hombre con la historia y las
cosas empiezan a cerrar muy bien. Finalmente la terrorífica “Cabin fever”
uno de los episodios más “Twin Peaks” de la serie, donde el pasado de Locke se
cierra y su conexión con la isla queda completamente establecida, además otro
personaje misterioso le da coloridos destellos de intriga a la trama (lo que a
este punto de la serie parecía imposible) hablo del inmortal (literalmente) Richard
Alpert (Néstor Carbonell). Del resto no hay mucho más que decir, los personajes
principales que quedan son totalmente desaprovechados, Claire (Emilie de Ravin)
que ya desde la segunda temporada empezaba a ser olvidada, aquí directamente
pasa a ser un decorado.
Si LOST empezó como una banda de rock llena estadios, para esta cuarta
temporada parecía más una banda indie pequeña y es que ya los productores y
equipo no estaban interesados en seguir cautivando publico sino en intentar
definir los derroteros de una historia que seguramente se estaba convirtiendo
en un dolor de cabeza y que para más remate abrazaba definitivamente la ciencia
ficción como elemento importante para su futuro desarrollo. Aún así, gran
temporada, y muy infravalorada.
TEMPORADA 5
Esta temporada al menos le volvió a entregar a Sawyer un carácter mucho más
desarrollado y consistente con su historia, pasa lo mismo con Kate, pero no
mucho más, incluso Desmond es dejado de lado en casi toda la temporada y que
decir de Faraday un personaje que fue la revelación en la temporada pasada,
tuvo un rol importante en los primeros capítulos de esta, luego es olvidado así
como así por conveniencias de guion, sólo para volver en un único capitulo
centrado en él que termina siendo además el mismo en donde lo eliminan. El
final de esta temporada nos presenta a Jacob, una especie de divinidad de la
isla que ya había sido mencionado en la tercera temporada. También se presenta
a su némesis quien sería él que se estaba haciendo pasar por Locke en el
presente, lo que retroactivamente se siente interesante y algo irónico ya que
con esto se dejaba claro que el FINAL BOSS sería el mismo Locke, pero pese a
todo esto el final de temporada se sintió como un desesperado intento de
conectar cabos sueltos a la velocidad de la luz y dejar todo tanteado para un
enfrentamiento inminente del – aj - bien
contra el mal. ¿Tanto escandalo y viajes en el tiempo para eso?
TEMPORADA 6
Luego de una temporada de mierda, la sexta por el sólo hecho de ser la final (anunciada con bombos y platillos) se pensaría que le pusieron más cariño, pero nada de eso. Mantiene las mismas groseras inconsistencias de guion que la quinta y ya los personajes no se les podía estrujar más, por lo que sólo tienen pequeños momentos estelares, y no todos, Locke, Desmond, Benjamin Linus, Sawyer y Kate tienen contadas escenas en donde la trama parece volver a centrarse en los personajes y sus relaciones. Incluso Jack tiene un gran momento, pero no podría decirte que esta temporada culmina la historia de la mejor forma, deja un montón de preguntas producidas únicamente por el mal planteo de la trama y al mismo tiempo los misterios que resuelven se sienten simples, aburridos, como si los guionistas se lo hubiesen pensado en el momento. Lo más desastroso fue descubrir qué es lo que era el monstruo de humo negro, realmente se farrearon grandes oportunidades de sellar la historia con broche de oro, en vez de eso, se enfocaron en una mirada maniquea de las cosas, con un final casi religioso-pastoral (la última escena es en una iglesia de hecho) en el que se reúnen todos los personajes y que contradice la obsesión de las últimas temporadas por darle mayor protagonismo a la Isla.
Si tuviese que darle crédito a esta temporada en algo sería en el uso de
los Flash sideways, que supuestamente eran visiones de una dimensión paralela
en donde la vida de lxs protagonistas era muy distinta en algunos casos y no
tanto en otros, lo que sólo sirvió para hacer referencias nostálgicas y guiños
a las primeras temporadas, pero bueno, el concepto de los Flash Sideways sí me
gusto y esperaba que fuese la clave real para todo, pero al final termino
siendo puras escenas de una especie de purgatorio berreta. Por cierto existe un
epilogo que esta más o menos bien, pero que no suma mucho más a la historia.
Y no hay mucho más que decir, pese a que las dos temporadas finales, a mi
parecer, son muy poco rescatables, es indudable que LOST fue un gran impacto a
la hora de pensar historias dramáticas de carácter épico y no puedo negar que
en algún punto la serie me hizo alucinar y dedicarle horas a crear teorías y
hablar con extraños de internet al respecto y generar comunidad no es algo que
cualquier serie logra tan fácilmente, así que a las finales, sea como sea, LOST
creo que es una serie yankee tan trascendental como X-Files o Breaking Bad.-
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