Estoy destrozado, me rompió el corazón. Ahora sólo siento rabia y dolor.... Alguna vez han escuchado a alguien pronunciar algo así o quizás tu has vociferado esas oraciones en medio de álgidos suspiros lamentosos, con total convencimiento de que el mundo cómo lo conocías, SE TERMINÓ. El acto de despecho es algo tan común que hasta ciertos animales pueden experimentarlo. Una mala gestión de aquella emoción puede desencadenar en una depresión o malvada ansiedark. No obstante, es una fase relativamente necesaria para orientar nuestro bienestar psicológico y expulsarnos (a veces violentamente) de nuestro sitio de confort. Transitar el despecho puede tomar muchas formas que a la larga resultan entrañables como ver películas descaradamente cursis, hacerse la paja todo el día viendo porno para secretar algo de endorfina rápida a tu cerebro, o mi favorita: escuchar canciones que te dejen más mal porque negativo + negativo = positivo.
En mi afán de enlistar y clasificar todo de alguna forma, me he dado en la ingrata e innecesaria (pero divertidamente mórbida) tarea de crear ocho categorías de música que escuchamos cuando estamos despechadxs bajo mi subjetiva apreciación.
LENTOS CORTAVENAS
No te juzgo sí te gusta escuchar esto en tus momentos break down, pero creo que has caído en la peor categoria de todas. Sin Bandera, Reik, Camila, DLG, Boys to men....en fin, todo lo que produce un poco de CRINGE cuando lo ves de lejos. Si te gusta escuchar esta música cuando estas despechadx es porque te gusta vivir esa etapa como una verdadera autoflagelación con la que luego te purificaras, casi como un monje que se infringe latigazos frente al altar del templo por haber pensado en las piernas desnudas de otra persona. Pero recuerda, no te juzgo.
Personalmente considero que estas canciones que hablan sobre separaciones y rompimientos letales sólo pueden caer bien en aquellas personas cuyos corazones laten al ritmo de una intensidad superior. También creo que en muchos casos el disfrutar estas canciones con el corazón roto ilustra mucho un modelo de relación afectiva asimétrica en el que una de las partes (la persona despechada) idealizó mucho la relación (aunque la otra parte allá sido sincera o mentirosa al respecto, esto último por supuesto reprochable) convirtiéndose, de esta forma, en una victima que debe soportar un largo, profundo y doloroso duelo. Mmm, cada quien sufre y supera sus etapas a su manera, pero igual todo esto me parece un poquitin innecesario, además este tipo de música es tan monotematica, repetitiva y anticuada en muchas de sus estructuras, se me hace hasta incluso patriarcal por la forma en que se expresan los sentimientos, pero bueno, debo admitir que hay algunas que me gustan mucho, aunque no para escucharlas con el corazon roto, sólo diré grande Diego Bonneta:
EL MANICO-DEPRESIVO NOVENTERO
Esta etiqueta no necesariamente la reservo para quienes vivieron los 90' experimentando en su apogeo toda esa seguidilla de HITS que hasta hoy siguen sonando melancólicos, urbanos, juveniles y totalmente devastadores. Hablo de Creep de unos proto emo Radiohead, de Disarm de los Smashing Pumpkins o la poderosa Black de Pearl Jam. Incluso en esta categoría entran algunos temazos anglosajones del 2000 o 2001 como la pseudo gótica I miss you de Blink 182 o la melosa Wherever you will go de los olvidados The Calling.
Por alguna razón el mainstream noventero apuntalo canciones cuya temática cambiaba todo el romanticismo de neon de los 80' por algo que representaba a una juventud que no reconocía, a diferencia de otras generaciones, una dirección tan clara en su vida, siendo el amor y las relaciones sentimentales el mayor lio que ordenar. En esta época nació el grunge, el emo y el Nu-Metal, música no muy alegre y con un mensaje rabiosamente desesperanzador. No dificulta mucho el sentirse doblemente mal cuando escuchamos esta música con el despecho detrás nuestro, con la típica imagen de un pack de cervezas a un lado y un pack de barbituricos al otro, para irse a negro de este mundo. El amor fue lo que mato a Kurcobein.
CLIENTE FRECUENTE DEL KITAPENAS
El bolero es mi música favorita para soportar o transitar el despecho. Por un lado es algo tremendamente Kitch y por otro siento que en gran medida se trata de algo muy latinoamericano. Antiguamente, por lo menos en Chile, cerca de los cementerios estaban los KITAPENAS, improvisadas cantinas que albergaban el dolor de quienes acababan de enterrar a sus muertxs. Esto también se traslado a cuestiones de despecho amoroso. No hay imagen más clásica que la de una cantina pequeña, rustica, oscura, en la que un músico sentado en una incomoda silla canta con su guitarra bajo el brazo mientras uno de los parroquianos le corea a todo pulmón al mismo tiempo que llora sin ninguna vergüenza, con un cigarro a medio fundir en la mano derecha y con la izquierda agarrando una cañita de vino. Espera, eso no es un meme?
Lemebel, Jorge Tellier, Juan Radrigán, Alfonso Alcalde, Juan Villoro, Garcia Márquez han escrito grandes anécdotas ambientadas en estos tugurios que prácticamente obedecen a otra época del mundo y por supuesto los boleros están allí, siendo un canto representativo de ese ambiente bajo la voz colorida, pero doliente de un hombre no necesariamente agraciado en los cánones hegemónicas, haciendo carne el verbo del sufrimiento en su garganta. Eso por supuesto no excluye al bolero de temas horribles como "Señor abogado" de Lucho Barrios en donde se cuenta la historia de un femicidio y lo peor es que quien la canta no siente ningún reproche de su acto, realmente si tu despecho se transita con ese tipo de canciones, pues....no sé, vevoh.
Mujeres manipuladoras, encuentros furtivos, dolor por el recuerdo y el completo remordimiento de poder haber hecho algo mejor para cambiar las cosas, pero también una completa abnegación al destino. Temáticas propias de los boleros con la que nos resulta simple empatizar y sentirse pateticx. Dejando de lado el horrible machismo que algunos temas expresaban, es imposible no respirar ese aire decadente que las letras de aquellos cantantes imprimen. La única restricción para "disfrutar" todo esto en medio del despecho es que tienes que ser viejx, porque vaya que gozan sufriendo con esta música lxs viejxs. Se acepta también el tango en esta categoría, que es cómo lo mismo sólo que con un baile incluido, y la escena que mejor lo representa lo podemos ver en la película de Wong Kar-Wai "Happy Togehter"
RANXERAS CUATICAS
Es una categoría muy similar a la anterior, pero las rancheras tienen una singularidad y es que en su obsceno dolor subyace siempre una rabia, un enojo y unas ganas de dejar la cagada que son bastante realistas de entender, creo que el mejor ejemplo es la genial bravata de Paquita La Del Barrio, pero también con un poco más de desparpajo como lo hace el sufrido y lúdico Juan Gabriel.
Es cierto, el imaginario romantico de las rancheras tiene que ver mucho con la posesión, con entender el amor como una forma de apropiarse en muchos aspectos de la otra persona. Considero que estas formas de entender las relaciones afectivas están íntimamente ligadas con las relaciones toxicas y bueno, de ahí al femicidio no es un paso muy lejano y México varga el estigma de ser uno de los países con la mayor taza de femicidios.
Actualmente la imagen arquetipo de un charro portentoso con toda la masculinidad miope que representa a travez de canciones como "Dicen que los hombres no deben llorar" de Pedro Fernández o la clásica "Sigo siendo el rey" se entienden a estas alturas (y quiero, realmente, creer que la mayoría lo entiende así) como una parodia a un modelo en desuso de lo que significa lo masculino, siendo una imagen mucho más aprovechada y potenciada por los trabajos de grandes DRAG KING. En fin, México le canta al dolor y las rancheras han terminado siendo una forma de colectivizar el dolor de un corazón roto, injustamente roto (se supone).
BLANCA HETERO
Escuchas pop de la década del 2000 mientras lloras porque Tommy te dejo por Samantha, la perra del equipo de porristas de la secundaria, quien le estuvo coqueteando durante el gran juego en donde Tomy anoto el punto de la victoria en el campeonato interestatal de Futbol (Americano obviamente) Pues dejame decirte que sin importar el color de tu piel ni tu percepción de genero, eso, es muy de blanca hetero.
Esta categoría se funde a la perfección con las comedias románticas adolescentes, esas que protagonizaba Lindsay Lohan o Hillary Duff. Pero aunque suene infantil, creo que este tipo de canciones son las que más dolor nos causan cuando las escuchamos en el contexto sugerido. Si bien las letras de estos temas no son una oda a la originalidad, siento en muchos casos que al escucharlas nos podemos identificar en alguna medida con la figura que la canta ya que generalmente sabemos la historia trágica y polémica de esa estrella....SAVE BRITNEY, por lo demás que sea música de blanca hetero no tiene porque incomodarte, el estereotipo no es absoluto, podemos escuchar lo que se nos de la real gana.
OTAKU LLORON
Y siguiendo con los inútiles estereotipos, acaso no saborean que cuando lxs otakus se enamoran (de seres de carne y hueso) también pueden sufrir despecho, pero contrario a lo que piensan, a menos lxs que he conocido para pasar las penas escuchan metal o incluso electrónica, y no, no cuento la música de videojuegos. Pero bueno, IMAGINEMOS un o una otaku arquetipicx y pensemos que temas lacrimogenos como Hitomi no Jyuunin de los pulentos Larc´n ciel acolchona sus corazones rotos.
FANS DE MORRISEY
Estas mal, acabas de terminar una relación y te pones escuchar The Smiths mientras afuera llueve. Es 1987 y la crisis economica toca tu bolsillo, tu perro Bull Terrier tiene hambre y tu único escape es invertir todo tu dinero en una tienda que vende aparatos electronicos BETAMAX. Ah por suerte la calida voz de Morrisey y los hermosos acordes de Mar apalean esta situación, por suerte, es 1987 y aún están los Smiths que seguirán por siempre juntos.
PD: Esto se aplica también a The Cure, pero el chiste no hubiese funcionado.
YOPERREOSOLA
Llorar y ser patetic ya paso de moda, ahora el despecho se vive matando la tusa, bailando y perreando, tapando ese oscuro vació existencial a travez de risas inducidas, luces estroboscopicas, parlantes que tiren la música a tope y larguísimos, interminables vasos de alcohol que se comparten entre varias manos.
En un momento de la noche te vas al baño, te miras al espejo mientras escuchas que la gente de manera alocada canta a coro No quiero que nadie más me hable de amor, tu rostro se ve completamente trapeado, entonces te acuerdas de esa persona que te dijo "No eres tú soy yo" cierras tus ojos, sacas tu celular, rastreas la última conversación que tuviste, un nudo en la garganta comienza a crecer, entonces abres los ojos, extiendes el celular y te sacas una selfie y la posteas en redes sociales con hashtag como #NOCHEHOT, #ONFIRE, #SOLTEBRIA. Después vomitas y vuelves a bailar, y la vida sigue y si tus potencias alegres las despierta esta música o cualquier otra de estas infundadas categorías, genial.
Ya sea perreando con todo o comiendo helado y escuchando a The Smiths, lo que sea que luego te haga sentirte mejor y más sano hazlo...menos escuchar a Arjona, por favor.-
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