lunes, 4 de julio de 2016

El rincón del ratón curioso: Brexit y arrepentimiento



Todo el mundo se volvió loco con el tema, pero no es menor, la salida de reino unido (UK) de la Unión Europea (UE) supone uno de los acontecimientos más dinámicos del año. Cae el dólar, se desploma la libra esterlina, surge el descontento, aparecen los arrepentidos mientras que los orgullosos reafirman su decisión, también surgen los aprovechados de siempre con respecto al asunto (Donald Trump, por supuesto) y un montón de repercusiones comerciales. Así que mejor le pregunto a usted profesor Cocoon, ¿Cree que es tiempo de entregarnos al pánico y estrellarnos las cabezas unos contra otros? 

  
¿Debe Reino Unido seguir siendo un miembro de la Unión Europea, o debe abandonarla? Esa era la gran pregunta que todos los países de UK se hicieron el pasado 23 de Junio y los resultados naturalmente dieron a entender que la opción de abandonar (leave) fue la prioritaria. Para muchos analistas el ex primer ministro David Cameron se puso la soga al cuello al prometer este referéndum al momento de realizar su campaña política, muchos concuerdan que nunca se imaginó este escenario en que la ciudadanía elegiría abandonar tajantemente  la UE rompiendo con una relación de más de cuarenta años en donde ellos solían ser, a pesar de todo, “la niña linda del baile”, su mala jugada política no le daba opciones ante las presiones de los miembros de su propio partido quienes por un lado pujaron por este referéndum y la de los poderosos de siempre (EE.UU, Francia, Alemania) que le recomendaron no ceder al respecto. Fue irse a un callejón sin salida y en este contexto Cameron o simplemente desoía el clamor popular o dimitía y naturalmente lo primero era un suicidio político así que de todas formas…Por lo mismo aunque el referéndum técnicamente no es vinculante para el parlamento británico, no tomarlo en cuenta sería un remedio peor que la enfermedad.

La UE es una organización política y económica compuesta por 28 países que permite la libre relación y circulación ciudadana, económica y social entre los habitante del conjunto de países que lo conforman (por eso en Europa se puede viajar a cualquier lado con único pasaporte y se usa la misma moneda, el Euro, igualito que en los juegos de Pokemon) Parece algo ideal para los del viejo continente, pero en los últimos siete años la UE las ha visto muy negras ya que en Europa ha habido una seguidilla de verdaderas protestas y descontentos sociales que tienen su raíz en la mala gestión económica y política de la organización sobre el continente, hecho que se vio reflejado con mayor asidero en la crisis económica Griega del 2012, donde justamente aquel helénico país tuvo la tentativa de dejar la organización en el llamado Grexit después de que la ciudadanía rechazará la política de la Troika, pero la comisión de la UE vetó esta disposición social al considerar que pasaba a llevar los tratados Europeos. Estos frenazos políticos sumado a la mala regulación económica venía cascando de hace rato a UK que se sentía desfavorecido al tomar en cuenta que su situación monetaria era mucho mejor que la mayoría de los países de la UE, esto porque según los defensores del Brexit se pone en una caja común más de lo que finalmente se recibe, para Reino Unido las regulaciones Europeas son excesivas y perjudican directamente a las empresas británicas. Sin embargo, UK tenía ciertos beneficios económicos especiales y a principios de este año Cameron negoció algunas consideraciones que la UE tendría que otorgarles si aseguraba su permanencia en el bloque. Aun así esto no se zanjó o simplemente no se difundió de la mejor forma, en la mayoría de los ciudadanos la idea de que la Unión Europea se aprovechaba de la buena situación de los británicos se hizo mucho eco.

El mercado único es el gran pilar de la Unión Europea y en el corazón del mercado único está el libre mercado, sin tasas ni aranceles comerciales, “trabas” que la UE pone cuando un país quiere dinamizar su mercado interno, al menos así lo veían y lo promulgaron los principales impulsores del Brexit que consistía en algunos miembros del partido laborista, gran parte de la bancada del partido conservador (entre ellos Boris Johnson, el Donald Trump británico) y el UKIP, partido nacionalista que puso el acento en razones sociales más que  económicas, y al parecer fueron convincentes.  


El problema de la oleada de inmigrantes sirios que viajan a Europa en condiciones críticas debido a la guerra que el país enfrenta, comienza a convertirse en un dolor de cabeza bastante fuerte para los gobiernos de países “desarrollados” que no tienen la voluntad de acogerlos advirtiendo ya estar colapsados de inmigrantes y  que la seguridad social en sus países frente al terrorismo está demasiado debilitada a causa de lo mismo, si bien esta problemática puede tratarse de distintas perspectivas (aquí una entrevista muy interesante a un abogado que se dedica al tema) para el sector más nacionalista de UK este problemita sería la hecatombe del frágil orden social, asesinatos a políticos incluido para avalar “LA tesis”. Mantener el control de sus fronteras y reducir el número de extranjeros que entran al país en busca de trabajo era una de las ideas que más orbitaba en la población Británica que se caracteriza bastante por  mantener un orgullo ajeno al del Europeo central, tal vez como resultado de estar más aislado que el conjunto de países que conforman la UE. 

Queremos paz, comercio y amistad con Europa, pero no que la UE tome decisiones por nosotros. Esa era la consigna, pero lo cierto es que lejos de esa idea casi juvenil de querer tomar el destino por sus propias manos, fue el discurso xenófobo y proteccionista el que generó la mayor movilización de los consultados, en especial de algunos jóvenes que lamentablemente mostraron la peor cara de lo que se supone es una generación inclusiva, sin considerar los beneficios laborales que era pertenecer a la UE y peor aún, en muchos casos sin saber si quiera qué significaba realmente el termino BREXIT. Era tan imponente este deseo de mantener a raya a los inmigrantes que uno de los principales puntos que Cameron aseguró de dejar en claro si Reino Unido se mantenía en la UE era justamente negar a los inmigrantes europeos durante sus primeros años en el país las prestaciones públicas dirigidas a complementar los salarios más bajos. 
 
El arrepentimiento de muchos jóvenes con respecto a la decisión tomada se vio reflejado en la manifestación que se dio en el Traflgare Square, aunque vale aclarar que la mayoría voto por la permanencia, la porción xenofóbica de jóvenes buscando cuartar la libertad de los inmigrantes se dejó sentir en la euforia previa al Brexit como se puede ver en el siguiente video.




Los jóvenes y adultos entre 21 y 38 años que hayan votado por el Brexit por cuál o tal motivo son seguramente los que más se están arrepintiendo a esta hora de la situación y han responsabilizado directamente a las antiguas generaciones .  "Sí, es triste ver cómo a los más mayores no les importa que ahora nosotros no podamos viajar ni trabajar en el resto de Europa, han decidido por nosotros, es frustrante", opinaba Fiona Reynolds, de 21 años, estudiante de arte. Aunque también hay cierta responsabilidad de haber ignorado el referéndum. Como siempre son los viejos los que van a votar y ya vemos qué pasó.



Las consecuencias reales


Más allá del montón de cosas que se han dicho al respecto, que las consecuencias van  desde la caída de las empresas británicas en otros países, problemas en los equipos de fútbol, el desprecio de medio mundo hacía las islas británicas, (incluso) las dificultades de seguir grabando Game Of Thrones y más importante aún el desequilibrio entre los países de UK que noestaban de acuerdo con la salida como el caso de Escocia en donde un 62% de la población opto por quedarse y ya se está barajando la posibilidad de un nuevo referéndum especial para que el país se mantenga dentro de la UE. 

Lo cierto e inmediato es que nadie quiere agarrar el fierro caliente que dejo Cameron, incluso Brian Jhonson y los principales impulsores del Brexit, la política se ha convertido en una anarquía más grotesca de lo habitual en donde el desconcierto ha llamado a la puerta de todos. Simplemente nadie sabe qué es lo que va a pasar, cuál es el destino más seguro, desconcierto que no es menor tomando en cuenta que está “independencia” no tenía garantías sino que simples promesas rotas.

“Nuestras promesas fueron una serie de posibilidades”, explicó el conservador Iain Duncan Smith al aclarar que lo que se decía en las campañas como mayor inversión a los programas de salud y sanidad al dejar de enviar dinero a la UE o el tan bullado control a los inmigrantes, la lógica se dejó ver en los primeros análisis al respecto: No se puede tener libre acceso al mercado único comunitario sin aceptar también la libre circulación de ciudadanos, y los negocios siguen siendo la prioridad, porque el 44% de las exportaciones británicas van a la UE. 

Sobre la supuesta autarquía económica que el Brexit preveía y su modelo proteccionista de mercado, tendría que verse  a plazo de un buen par de años que tan efectivo será esto, naturalmente se esperaba un desplome de la libra esterlina y el cierre inmediato de muchas sucursales bancarias, por lo que ante una inminente crisis o situación de recesión el gobierno tendrá que destinar los gastos de otros sectores a regular la economía doméstica, justamente una de las promesas que la campaña del Brexit era la de conservar el desarrollo de diversos sectores como el agrícola, pesquero, universitario, de investigación o proyectos regionales que antes era abastecido con el dinero que proveía la UE. 
 

¿Qué nos enseña esto?


La UE es una organización muy atada de manos que se ha visto envuelta en situaciones inoperantes durante los últimos años. La crisis de refugiados, el desplome económico,  mantenerse absurdamente neutral ante unas cosas e imponerse convenientemente en otras son fallas que hacen replantearse la integridad global de este club, pero el Brexit más que una solución se ha convertido en un problema más grande al respecto. Es la evidencia de como las voces nacionalistas y egoístas se aprovechan de la incredulidad y malestar de un pueblo con consignas simplonas donde el criterio es lo último que se ejecuta, y en vez de trabajar por superar esos problemas sociales se hace mella en el odio para que  los brotes de racismo y poca cordura se apoderen de quienes se les blindó con orgullo patriótico y con burlonas promesas económicas, finalmente UK se aisló como un niño taimado y su opción lejos de manifestarse como una revolución de valores y posibilidades deja patente el poco convencimiento en un sistema mundial que ha perdido garantías, si bien es un giro a la derecha como viene pasando en todos lados, es un extraño giro a la derecha ya que la UE dentro de toda su vileza parece quedar bien parado y como una víctima ante esta situación. Lo más jodido de esto es que quien pierde es siempre el pueblo, los jóvenes que ya no tendrán grandes oportunidades laborales, los viejos que han perdido parte de su jubilación, los obreros del sector primario, los inmigrantes británicos establecidos en otros países de Europa que no saben qué será de su destino, los latinoamericanos que buscaban expandir sus estudios en Europa. Todo es un desplome que busca fragmentar los países sin un claro referente lógico….Como dijeron por ahí, paren el mundo, me quiero bajar.-  

ENLACES 

Las promesas rotas del Brexit: http://internacional.elpais.com/internacional/2016/06/30/actualidad/1467291829_906832.html

Los jovenes y el Brexit: http://internacional.elpais.com/internacional/2016/06/28/actualidad/1467115809_027115.html

El problema de los refugiados en Europa: https://www.youtube.com/watch?v=X0mU_UobJ5k


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