Los mejores cantos de cisne

Si hay algo que añora todo artista musical que alcanzo cierta notoriedad en la industria, es dejar un legado artístico. Algunos lo logran, otros son sólo una marca evanescente dentro del inabarcable panorama, pero aquellos que sienten que su aporte es distintivo son justamente los mismos que cada disco lo trabajan con una pasión inusitada, como si después de ese no hubiese nada más que decir. Es el llamado Canto del cisne, el querer despedirse con el cuello en alto, muchas veces no sólo de su carrera si no que de su propia vida ofreciendo un último esfuerzo valioso. Algunos sabiendo que se les avecina la noche trabajan como locos para lograr generar un disco que los complazca en ese sentido, otros por tragedias o inconvenientes del azar no ven venir su destino, pero aún así logran sacar un disco que los deja a todos con la sensación de que ese era el perfecto para ponerle fin a su carrera. Por supuesto hay otros ejemplos lamentables como el de Lou Red, Michael Jackson o Donna Summer que no fueron capaces de entregar un último trabajo decente por diversos motivos y eso es una estaca que los fans no se sacan por más trabajos póstumos intentando limpiar esa mancha salgan después. Para esta lista no incluí último trabajo de bandas o grupos, si no sólo de solistas aunque tampoco de artistas con carreras muy cortas como la de Amy Winehouse por ejemplo.

07.- Johnny Cash “American IV: The Man Comes Around” (2002)

 

El que este disco este tan abajo en la lista es porque en realidad forma parte de una antología y además porque está conformado en un 80% por canciones de otros artistas, no obstante Johnny se las apropia de una manera tan íntima y bella que si no fuesen conocidas nadie creería que no salieron de la cabeza de este “Gran hombre de negro” de la música country…aunque el género en realidad, le quedo chico ya que Cash hizo en vida muchísimo más llegando a influenciar estilos tan disimiles como lo son el Hip-Hop y el punk. Este disco tiene un aura de solemnidad en cada segundo, Cash alcanzo a grabarlo antes de la muerte de su esposa, June Carter, que fue su compañera incondicional, cuatro meses después de la muerte de ella y con el disco corriendo con éxito de ventas Johnny murió en el hospital debido a una complicación de la diabetes que lo aquejaba. Su último hit un cover del tema “Hurt” de Nine Inch Nile le hizo pararle los pelos al propio Trent Reznor, compositor original, quien reconoció que esa ya no podía ser más su canción, y es cierto la versión de Cash supera por mucho a la original, por lo demás el video de esta es bellísimo y el álbum es un adiós directo y sincero al mundo.

 

06.- Luis Alberto Spinnetta “Un mañana” (2008)

Bueno, aquí hay un poco de trampa. “Un mañana” en realidad no es el último disco que el flaco grabó en vida, ese fue “Los amigos” que se trata de una jam sesión junto a otros músicos en donde también se tocaron unas pocas canciones nuevas de su autoría, se grabó en 2011 y quedaría como algo inédito hasta que los hijos del músico decidieron remasterizar y agregar elementos de producción para lanzarlo el 2015. Además a principios del 2010 Spinnetta dio una serie de conciertos increíbles bajo el título “Spinnetta y las bandas eternas” que repasaba a modo de retrospectiva sus cuarenta años de carrera junto a invitados de alto calibre interpretando canciones de todos sus proyectos, en fin, a lo que voy es que si bien “Un mañana” no fue el último proyecto que se embarcó el guitarrista podríamos decir que fue su mensaje para decirle a sus fans “Me queda poco”  quizás por lo mismo al año siguiente desarrollaría los conciertos de “Spinnetta y las bandas eternas”. “Un mañana” contiene el sonido etéreo, progresivo y jazz que tanto supo cultivar el flaco, con mensajes de adiós en sus letras como “Tu vuelo al fin”, “Preso ventanilla” u “Hombre de luz” y el sentir de la guitarra con la personalidad etérea que Spinnetta le supo brindar, el trabajo se convirtió en un clásico de la discografía argentina, por lo demás un tremendo disco de jazz-rock con el cual se despidió muy augusto del mundo. 

 

05.- Leonard Cohen “You want it darker” (2016)

Bueno, este es el caso más reciente ya que el poeta murió hace sólo un mes atrás (o menos, de hecho) sin embargo en Octubre alcanzo a lanzar “You want it darker” un trabajo que sería el punto final con el que Cohen quería concluir su carrera. Uno de los cantautores más sensibles y con mejor labia dentro del espectro, tuvo que vivir hasta las últimas instancias de su vida todos los infiernos que un ser humano puede soportar, incluso en algún momento tuvo que interrumpir su retiro por una estafa que le hicieron, pero bueno, gracias a esa mala suerte Cohen pudo seguir entregando algunos discos llenos de sentimiento a su fanaticada. Durante la grabaciones de este trabajo, los dolores en la columna vertebral que lo aquejaban eran demasiado notorios tanto que muchas veces no podía si quiera grabar las pistas de voz parado. Aunque el disco es bueno, para mi no representa un punto muy alto en su carrera la cual ya está sobrepasada por el éxito de otras tremendas y lugubres canciones que hacen ver a Creep de Radiohead como una oda a la felicidad. Lo que si tiene de especial es que este trabajo es el adiós definitivo desde su puño y letra, quizás por eso para quienes habían entendido derechamente el mensaje su muerte no fue algo tan sorpresivo y hasta pudieron sentirse felices por la liberación que a Cohen esto le otorgo.

04.- Nina Simonne “A single Woman” (1993)

Una personalidad conflictiva, extrema e incombustible. Nina Simmonne era de esas artistas que hacía de su música un instrumento de lucha, comprometida con la igualdad de derechos para la sociedad afroamericana en Estados Unidos, esta dura mujer hizo un camino político dentro de su música jazz (etiqueta que le molestaba mucho), dejando inmortales canciones a la posteridad y reversionando otras desde su negritud que también supo colocar en el radar de la música popular como el superior cover que hizo de “Revolution”  de John Lennon. Quizás por lo inconmensurable de su vida es que el mundo pasa por alto “A single Woman” su última producción musical que en realidad no era una despedida ya que ella siguió realizando conciertos por muchos años, pues murió en 2003. Sin embargo, no volvió a pisar un estudio de grabación durante todo ese tiempo, tal vez porque “A single Woman” la dejo realmente satisfecha y sentía que intentar cualquier otra cosa que lo superase sería algo estéril. Se trata de un trabajo de jazz, soul y pop con un sentido mucho más conciliador que sus discos anteriores, como si hubiese hecho las paces con sus sentimientos. Tal vez también era el contexto de su vida en ese entonces, pero en este disco Ninna se escucha más cometida, tranquila y feliz (“Marry me”, “Lonesome cities”, “A single Woman”) con un piano alegre y esperanzador, aunque eso no quiere decir que no haya espacio para el dramatismo y las atmosferas tensas como la genial "Papa,Can You Hear Me?";  "Just Say ILove Him"; “Il n'y a pas d'amour heureux”. Un buen disco que ponía punto final a una carrera grandiosa.

 

03.- Bob Marley “Uprising” (1980)

 

Durante las grabaciones de este disco Bob ya estaba muy aquejado por el cáncer que lo invadía, aunque su energía no era la más altiva, su banda, los Wailers, entendiendo a la perfección su delicado estado de salud hicieron lo posible por crear un disco que resumiera de la mejor forma la carrera que habían llevado a cabo y lo lograron de tal manera que para muchos este disco se come en gran parte la carrera de Bob Marley con canciones icónicas como “Redemption Song”; “Could you be loved”; “Work” siendo uno de los trabajos más cuidados y elaborados en cuanto a sonido, además que su contenido está basado con mayor ahínco en el Rastafarismo, la religión de Marley, que por lo demás es un tema importante para todo seguidor de la cultura Reggae, el eje del disco es la búsqueda de la espiritualidad en el mundo material. Como una epifanía el trabajo anunciaba el adiós al mundo de Marley quien siguió haciendo giras en la medida de lo posible. Murió un año después de lanzar “Uprising”.

02.- Bobby Wockman “The bravest man in the world” (2012)

Uno de los cantos de cisne más sinceros y aplastantes. Wockman luego de un periodo alejado de las pistas, o mejor dicho, olvidado debido a sus problemas que incluye una batalla contra las drogas,  una enfermedad degenerativa como el alzhéimer y un cáncer que casi lo mata antes de tiempo. Dueño de una carrera fructífera y aunque fuerte exponente del soul se paseó por otros estilos y curiosamente siempre se le vio más cómodo dentro del mundo del rock. En 2010 Damon Albarn lo  llamó para grabar un tema de su banda Gorillaz y surgió una conexión bastante interesante entre ambos, quizás alimentada por el fanatismo de Albarn hacía la música negra. La cosa es que “The bravest man in the world” es todo un epitafio, un disco que mezcla las capacidades sonoras de Albarn como productor y el talento vocal e impetuoso de Wockman (a pesar de que sobrepasaba la barrera de los 70 para ese entonces) El disco se ha convertido en uno mis discos favoritos por esa reinvención de soul mezclada con electrónica tan elemental que se combina de forma natural, por ser además el colador definitivo de la carrera de Wockman, y es que si buscas un disco para empezar a escucharlo y recorrer su carrera este es el indicado, me saco el sombrero ante este hombre que es todo un luchador y también ante Albarn por habérsela jugado por un artista que la industria lo había dejado de lado y que no hubiese podido sacar tanto potencial de no ser por la intuición del británico. Mis temas favoritos son por supuesto el que le da el nombre al disco, también “Whatever happened to the time” con esa reminiscencia a “Da ya think i`m sexy” de Rodd Stwart, “Please forgive my heart”; la energica “Love Is Gonna Lift You Up”, el dueto con Lana Del Rey “Dyaglo reflection” o la electrónica  soul “If There Wasn't Something There”

01.- David Bowie “Blackstar” (2016)

Nada, creo que no era una sorpresa ver a Bowie por aquí. Su muerte para la cultura pop significo una grieta que el 2016 siguió abriendo y muy posiblemente los próximos años siga causando estragos. Lo sorpresivo que fue el fallecimiento a sólo días de haber lanzado un disco tan increíble nos dejó a todos helados. Definitavemente era su despedida a lo grande, cerro el ciclo con estilo, con canciones retrospectivas, pero de una claridad técnica y musical maravillosas, automáticamente pasaron a ser clásicos contemporáneos por lo que resulta bastante triste el sentir que nunca se podrán escuchar de la boca de quien los creo. Como sea, Blackstar estampó el legado de Bowie donde tiene que ser, en el cielo. Temas como “Lazarus”; “Blackstar” o “Girl loves me” de un ambiente oscuro y denso contrastan en buen balance con los ritmos crepusculares de “I Can't Give Everything Away” o “Sue (or in a season ofcrime)” El jazz que envuelve todo el disco de la mano del gigante saxofonista Donny McCaslin le da ese toque experimental y vanguardista que el duque siempre buscaba en sus producciones. Sin duda un disco exquisito, compacto (se hace demasiado corto, es lo único malo) y que no se agarra necesariamente de los sonidos nostálgicos como su anterior trabajo “The next day” (2013) – aunque ese igual fue un regreso y trabajo increíble – para explotar su figura. Muchos sentimos que este Blackstar por sus características tan rompe esquemas era el comienzo de algo nuevo en la carrera del cantante, pero bueno, en realidad era el fin de un ciclo. Y qué manera de hacerlo. Bowie te extrañamos y ningún disco será suficiente aliciente como para suplirte, pero te agradecemos el haber dejado uno tan grande al final del camino.-