Creo que el deseo de muchos con
respecto a las bandas de rock que aman e idolatran es haber estado allí en uno
de sus primeros conciertos o sino en el último. Esa presencia en la finitud de
la vida de una banda de rock es una atracción casi excitante que todo fanático
fantasea, obviamente cuando los músicos se presentan en sus comienzos más
humildes nadie da un centavo por ellos y nadie se imagina nunca qué tan lejos
puedan llegar y bajo qué concepto eso puede asegurarse, de todas formas revisar
el antes de muchas bandas cuando tenían la oportunidad de haber optado por una
vida completamente paralela en la que terminaron y darse cuenta por medio de un
repaso general qué tan lejos llegaron
“esos loquito que metían ruido” te genera una sensación de placidez porque
quién sabe, tal vez esa banda de mierda que estaba tocando de fondo en el bar
donde te emborrachaste quizás en diez años llegarán a dominar el mundo,
recuerden que Los Beattles tocaban en un bar de Hamburgo y de seguro los
borrachos no los pescaban mucho.
Aquí un somero repaso sobre las
primeras tocatas, presentaciones o registros anecdóticos más atrayentes de
bandas que hoy en día son leyenda, mito y leyenda: